En la búsqueda de nuevas alternativas para el manejo del levantamiento de polvo y la resuspensión del material particulado, se identificó y probó el aceite de palma como un aglomerante natural, que garantiza la fijación de las partículas de la capa de rodadura, evitando así la emisión de polvo por el paso de vehículos y/o por acción de los vientos.